Aralia japonica Macetero N°15

La Aralia Japónica (Fatsia japonica) es un arbusto perennifolio de origen japonés conocido por sus grandes hojas palmeadas y brillantes, similares a una mano, que aportan un toque exótico y fresco a cualquier espacio. Es una planta resistente, ideal para jardines de sombra o semisombra, patios y terrazas protegidas, así como para interiores luminosos. Florece en otoño con umbelas de flores blanco-crema. 

Características principales:

Hojas: Grandes (hasta 30-40 cm), palmeadas, con 7 a 9 lóbulos y bordes aserrados, de un verde lustroso. 

Porte: Arbustivo y de crecimiento erguido, pudiendo alcanzar 1.5 a 3 metros de altura en suelo. 

Floración: En otoño, produce umbelas de flores blanco-crema, que luego se convierten en frutos en racimos. 

Usos:

Jardinería: Se utiliza en jardines sombreados, patios, balcones y terrazas. 

Interiorismo: Es una planta de interior popular para espacios amplios y bien iluminados. 

Decoración: Ideal para dar un aire fresco y tropical, y para combinaciones con otras plantas como helechos y hostas. 

Cultivo: 

Luz: Prefiere la semisombra o la sombra luminosa.

Suelo: Requiere suelos ricos en materia orgánica, húmedos y bien drenados.

Riego: Mantener el sustrato húmedo, pero sin encharcar.

Poda: Se recomienda una poda ligera para mantener su forma y retirar hojas secas.

Consideraciones:

Reproducción: Se puede reproducir por semillas o esquejes. 

Toxicidad: Las bayas pueden causar malestar estomacal en humanos, aunque la planta en sí no es tóxica para perros y gatos.